The adoption and use of big data and analytics is transformative, and it touches nearly every aspect of business in the world today. There’s no escaping its presence. Retailers are using big data to improve customer experience and sales, salud professionals are using it to improve efficiency and care, and financial firms are using it to compete with tech companies. But legal professionals need científicos de datos también.
En el mundo jurídico, la información es poder. Entender a los clientes y su situación y posición, comprender cómo influye eso en la ley y determinar qué argumentos o puntos destacar son parte de la construcción y la victoria de un caso.
Un elemento básico del trabajo de todo profesional del derecho es pasar horas -o incluso días- revisando libros y documentos, registros policiales, historiales de clientes y un sinfín de archivos en busca de información relevante. Cuanto más arriba en la cadena jurídica se encuentre alguien, más ayuda habrá, incluso de becarios y estudiantes. Sin embargo, por mucho que se automatice el proceso con la ayuda de los colegas, sigue haciéndose manualmente y es increíblemente tedioso.
There’s a much better, more efficient and modern way. It involves big data, AI or aprendizaje automático tools, and advanced analytics. These technologies can be used to not only automatizar el proceso de recogida de información pero también almacenar los datos de forma más eficiente y organizada. Imagina no tener que buscar nunca un capítulo o un versículo concreto en un grueso libro de derecho. Basta con buscar temas, casos o posibles resultados para encontrar lo que necesitas, digitalmente.
Por supuesto, antes de que se pueda presentar o disponer de un sistema jurídico completo y digital, la información relacionada debe ser traducida y procesada a través de dichas plataformas. Esto, de por sí, llevará un tiempo considerable.
That’s exactly where knowledge of ciencia de los datos comes into play.
Creación de una base de datos de investigación jurídica
The way to develop or create a system with investigación capabilities is to simply transcribe and enter legal information into a database. The resulting AI and machine learning tools will reference this data to find the answers necessary. Such databases don’t exist yet, at least not in full. It will take time and resources to convert all important legal documents, books , nd studies to the digital world.
Hay algo más en juego que la simple conversión de texto físico en datos. Estamos hablando de información altamente sensible, especialmente en lo que respecta a investigaciones activas y casos en curso. Los datos que se almacenan deben ser seguros, privados y libres de accesos no autorizados. Esto también es un principio de la ciencia de los datos que implica la protección y el manejo adecuados de la información que se posee. Muchas tecnologías impactar en las leyes existentes o generar la necesidad de otras nuevas a su llegada. No hay más que pensar en los vehículos de autoconducción y en cómo la sociedad moderna está tratando de prepararse para su despliegue.
El proceso es más adecuado para quienes tienen experiencia en el campo de la ciencia de los datos y la informática. Por desgracia, saber qué datos son importantes y deben conservarse es algo que solo podría manejar un verdadero profesional del derecho.
Se impone una fusión entre las dos profesiones. Algunos ya se están tomando la libertad, como Bennett Borden del bufete de abogados Drinker Biddle & Reath.
Furthermore, once you have the data in place, you’ll need skilled legal professionals and data scientists to build the algorithms and applications used for advanced analytics. This includes apps that can find the information you’re looking for by scouring a database. They don’t just magically appear. They have to be constructed and developed, and then honed over time so the responses and answers are accurate.
¿Cuál es el resultado?
Supongamos que un sistema integral, como el que estamos describiendo, existiera aquí y ahora. ¿Cuáles serían los resultados? ¿Cuáles son los beneficios, y merecen la pena todas las molestias?
La analítica, en general, permite una toma de decisiones mucho más sólida y un futuro más informado. Considere cómo funciona en el comercio minorista y el marketing. Con sistemas completos y contextuales, los minoristas y los vendedores pueden ver los hábitos de los clientes, sus demandas e incluso sus reacciones ante diversas decisiones. Esta información puede utilizarse en el futuro para tomar decisiones más informadas o para predecir el comportamiento de los clientes. Es como conocer las jugadas de ajedrez de tu adversario antes de que lo haga.
Los mismos beneficios se ofrecerían en la profesión jurídica. La analítica puede ayudar a conseguir una mayor capacidad de toma de decisiones, a construir casos mejores y más ganables, y a encontrar la información jurídica relevante entre cientos -si no miles- de documentos y materiales transcritos. Y lo que es más importante, esto puede hacerse rápidamente, mucho más rápido que cualquier equipo humano, sea grande o no.
Ley Ravelcreada en 2012, ya está haciendo algo parecido. Ofrece un servicio llamado "Judges Analytics" que busca entre todas las decisiones tomadas por un juez concreto para ayudar a encontrar contactos que simpaticen con los argumentos.
Lo que los datos modernos significan para el derecho
El conocimiento es poder, especialmente en el sector jurídico. Cuanto más equipado e informado esté un profesional, mayores serán sus posibilidades de construir y ganar un caso. Esto se aplica no sólo en los tribunales penales, sino también en todos los aspectos del derecho. Los procedimientos de patentes y de negocios requieren la misma concentración y atención a los detalles, lo que puede resultar tedioso en estos casos.
Estas modernas tecnologías pueden automatizar y proporcionar servicios más eficientes para todos. No se pueden ignorar los riesgos y los problemas de seguridad que conlleva el paso a la tecnología digital, pero muchos de esos problemas pueden evitarse con la experiencia adecuada en TI. El manejo de dichos datos e información también se confía mejor a los científicos de datos, que saben cuándo, dónde y cómo buscar. Y lo que es más importante, pueden ayudar a influir directamente en el desarrollo de dichos sistemas, que proporcionarían las herramientas que las plataformas de IA y aprendizaje automático necesitan para interactuar con los datos jurídicos. Los profesionales del derecho necesitan científicos de datos para agilizar sus procesos y para obtener conocimientos avanzados que les ayuden a tomar decisiones fiables con seguridad.